las flacas

¡Como he podido esperar tanto tiempo para hablar de este tema!

El concepto de flaca no es un concepto fácil de entender si no es en directo y con una demostración práctica.

La flaca en muchas ocasiones se confunde con un bofetón, una palmadita, una colleja y hostias similares. ¡Pero no son flacas!

La flaca es una muestra dual, ambigua, de amor-odio, respeto-cachondeo. Cuando te dan una flaca normalmente nunca sabrás como reaccionar, si con violencia o con cariño.

Una flaca es una técnica manual que se realiza a otra persona, y se le practica en la zona concreta que se puede observar en el gráfico adjunto. Abarca desde la cara a casi la nuca, rozando la oreja (depende del tamaño de la mano y de la cabeza – Pau Gasol a un pin y pon abarcaría notablemente más zona).

Dicho acto tiene que tener la dosis justa de fuerza, ya que si es en exceso se corre el riesgo de llegar a ser una torta y por lo tanto traerá repercusiones; y en defecto no creará la situación de tensión no resuelta que se crea.

La mano debe ser colocada para que haga el ruido suficiente para hacer sorna entre los que se encuentran alrededor, y el sujeto comprenda el punto de ridículo que ha sumado al recibirla.

El prestigio de una flaca es directamente proporcional cuanta más diferencia de fuerza, poder, inteligencia, fama o resolución exista entre el que la imparte y el que la recibe (escalafon menor hace flaca al mayor), aunque según la situación y lo que lo merezca el “flaqueado” dará mucha risa.

Como una imagen vale más que mil palabras, os dejamos una flaca real. No que haya existido, bueno sí que existió, pero real de rey… Bueno, vosotros mismos lo podréis ver (segundo 13):

Impartid flacas a quien se las merezca y el mundo será un mundo mejor.